El
Fantasma
Sobre
brasas de hielo vagamos en libertad,
hay
una luz que te alumbra, alguien que te mira.
Siempre
el mismo fantasma acechando en el hombro,
soberano
de las cosas simples,
entre las aguas de la bendición
Sé
que vas contra el viento y jugando con fuego.
Tu
ilusión ya marchita, no tiene salida.
Sos
demasiado sencible para ciertas voces,
tu
mentira tiene patas largas,
entre las aguas de la perdición.
Y
es así,
ya
no podré mirarte mal a los ojos otra vez.
Tu
fantasia puede ser más macabra que este amor.
No
necesito gastadas lecciones de vida.
Busque
en tus brazos calmar el dolor,
sobre
la misma canción.
Mira
el cielo el fantasma se tira, me pide más.
Su
desafio me anula los cinco sentidos.
Si
no decido buscarte seré más pequeño,
más
vulnerable de todo pasado,
aunque esa noche sea mi bendición.
Son
heridas que el tiempo nunca cicatrizará,
más
con los años vividos, ¡vidas paralelas!
No
es demasiado cobarde ser parte del juego,
la
pasión no brota en todas partes,
aunque esa noche sea mi perdición.
Siempre
as,í
despertarás
contándole tu sueño a la pared.
Si
esa salida se te fue de las manos, dejalo...
Estoy
cansado de estar siempre del mismo lado.
Siempre
el fantasma acechando de a dos,
sobre
la misma vieja canción.
Los peores del condado